El 31 de octubre al anochecer, la fiesta de Halloween entra en su apogeo. Una de las costumbres más famosas la noche de Halloween entre los niños y adultos es disfrazarse, cuanto más terrorífica y esperpénticamente mejor. Con el disfraz puesto hay que recorrer las calles yendo por las casas del barrio. Las pandillas de niños van por la calle con sus calabazas, llaman a las puertas y cuando el inocente visitado abre la puerta, lanzan el grito unánime truco o trato (trick or treat). La tradición exige que el dueño de la casa ceda al chantaje, regalando a los niños todo tipo de dulces y golosinas de Halloween. Eso es lo que se llama hacer trato (treat) con ellos. De no hacerlo así y no darles nada, el vecino se expone a los trucos (tricks) de los niños disfrazados, que suelen ser el lanzamiento de huevos contra la fachada de la casa.
Truco o trato: origen e historia
El origen de truco o trato (trick or treat en inglés) es una costumbre que debe su origen a la persecución de los protestantes contra los católicos en Inglaterra, particularmente en los siglos XVI y XVII.
Debido a estas persecuciones, James I (rey protestante) y su parlamento, fueron víctimas de un intento de atentado. Pero el plan fracasó cuando Guy Fawkes, uno de los organizadores, habló bajo la presión de los verdugos y traicionó a sus compañeros, siendo posteriormente ejecutado.
Todo ello dio origen a una costumbre, de carácter más o menos burlesca, mediante la que pandillas de luteranos, los cuales protegían su identidad bajo máscaras lúgubres, celebraban la fecha del descubrimiento de la traición.
Para ello, visitaban los hogares católicos y les exigían pasteles y cerveza.La amenaza en forma de frase, se hizo popular muy pronto: "Truco o trato"
Dicho lo cual, finalmente la costumbre se trasladó a América y se pasó al día 31 de octubre, uniéndose a la fiesta de Halloween.